Actualiza, que no es poco

Lo sé, lo sé: no tengo perdón. Ni excusa. Lo cierto es que no sé por qué llevo tanto tiempo sin escribir. ¿Será que me voy quedando sin lectores? No puedo afirmarlo ni desmentirlo... El caso es que llevo una época bastante movidita, quizá, principalmente, por las clases. Sí, las clases me tienen bastante ocupada.

Tenemos un examen parcial que salió peor de lo que esperaba (aunque mal de muchos...), un examen parcial de interpretación consecutiva que se acerca peligrosamente, un taller de traducción del francés que fue un fracaso absoluto (ya en tercero de carrera, rodéate de chavales de instituto que no tienen ni idea de francés y sabrás en qué perdí el tiempo la mañana de mi lunes sagrado) y un puente quizá demasiado largo (ayer había una clase menos y, sinceramente, no merecía la pena ir a las otras dos que tenía), todo ello rodeado de un viaje a Barcelona que fue sencillamente genial, porque pude disfrutar de las dos cosas que más me gustan o, en concreto, de lo que más me gusta (el mar) y, por encima de todo, de la persona a la que más quiero.

Sí, con esto resumo qué se cuece en mi vida y en mi cabeza, por decirlo de algún modo.

 

Próximamente, un taller de subtitulado, otro de interpretación simultánea, una conferencia sobre el japonés en el manga y el anime, y una clase relámpago de finés... ¿Conseguiré aquello que llevo buscando desde que empecé la carrera? ¿Sabéis a qué me refiero...?

... A aprender.