XV Salón del Manga de Barcelona

 Ya algo recuperada del viaje y entre ejercicio de Francés y ejercicio de Francés, voy a contaros qué tal me fue en el Salón del Manga de Barcelona.

Sábado 31
 Salimos el viernes a las doce de la noche y llegamos a Barcelona a las ocho de la mañana. Directamente, fuimos al Salón del Manga, donde nos esperaban no una, sino dos colas.

Primer consejo: Compra las entradas con anticipación: así, te evitarás una cola.

 Después de una hora u hora y media de colas, conseguimos entrar en el salón. ¡Por fin! He de decir que es imenso comparado con Madrid (al menos, esa es la primera impresión que da). Después de otra hora de preparativos (se tarda bastante en maquillar a un Piccolo) y de ponerme la faldita de colegiala (ya que estábamos...) empezamos, por fin, a dar una vuelta por el salón. Mientras, iba en busca de Korin, a la que no conseguía encontrar (xDU). Peero por fin nos vimos y demás. (Aunque no nos hicimos ninguna foto.) Después seguí dando vueltecillas por el salón, comprando... Lo típico.

 El Salón estaba llenísimo de gente (me recordaba un poco al metro en hora punta) y siempre te chocabas con alguien (y eso que yo no llevaba cosplay... -me alegro-).

 Bueno, pues ya por la tarde fuimos al hostal, que en realidad era una pensión. ¡Y qué pensión! ¡Qué cutrez, por Dios! En fin, tampoco era plan de exigir mucho, pero es que... era muy cutre, en serio (x_D).

Segundo consejo: Si alguna vez vais a Barcelona, os diré dónde no tenéis que alojaros.

En cuanto a cómo nos movíamos por Barcelona, íbamos en metro, claro. Me gusta más el de Madrid, pero este tampoco está nada mal. Me hizo gracia que en el andén, mientras esperas, había "hilo musical".

Domingo 1

 Otro día en el Salón del Manga: más compras, más paseos y, sobre todo, más encuentros con gente conocida... de Madrid (xD). Qué cosas.

Comimos comida japonesa y por fin probé el taiyaki: se trata del pececito relleno de pasta de judías dulces, ¿sabéis a qué me refiero?

 Después del salón, nos acercamos un ratito a la playa; al menos, para ver el mar (aunque ya era de noche). El mar... Eso sí que no lo tenemos en Madrid.

Nos costó encontrar la playa propiamente dicha (con arena y tal) y de hecho, nos alejamos tanto que nos perdimos un poco y al final cogimos un autobús para ir a la parada (aunque solo nos quedaban dos viajes en el metrobus, teníamos una hora y cuarto para coger el metro: en ese caso, el billete seguía valiendo. Curioso).

 Luego en el metro nos encontramos con más gente y estuvimos en la estación de autobuses esperando a que llegara el de Madrid.

 Una vez en el autobús, había un tío que no paraba de toser: cada vez que me dormía, me despertaba. (T_T) Así, el viaje ha sido más pesado que el de la ida, pero hemos llegado a las 7:15, por lo que hemos llegado tres cuartos de hora antes.

 Y bueno, después he vuelto a casa (me ha costado horrores no dormirme en el metro), he desayunado algo y me he echado un rato. Ahora ya estoy menos zombi, pero sigo estando cansada.

 Eso sí: parece mentira que haya estado en Barcelona (¡y que haya vuelto esta misma mañana!).

 Para (casi) terminar, mis impresiones.

 Primero, para la próxima me llevaré maleta (pequeña, pero maleta): es más cómoda que la mochila.

 Segundo, no es que el salón me haya decepcionado, pero pensé que sería más... espectacular. Quiero decir que el de Madrid no está nada, nada mal. Y hablando de decepciones, el nivel de cosplay de este año ha sido, en general, un poco bajo (aunque había cosplays estupendos, por supuesto). En especial, los de Bleach. No me arrepiento de no haber ido de Gin, pero... no sé, me esperaba más.

 Con esto no quiero decir que no vaya a volver: seguramente, el año que viene volveré (pero me alojaré, como poco, en un hostal), pero esto me ha servido para valorar más el de Madrid, en el que, por cierto, hay (en mi opinión) más buen ambiente, buen rollo, hay stands de asociaciones, etc.

  Nos encontramos con la chica que iba de Mayuri por casualidad, y estuvimos un rato con ella y con el que iba de Hisagi (¡no los veía desde el Expomanga!). La de la derecha va... ¿de Code Geass? No sé, pero la foto quedó chulísima.

 Ya para terminar, mis compras.

  Tenemos unas cuantas chapas (me encanta la de Gin), una camiseta de Love Hina & Negima!, una Pinky Street de Nagato (llevaba detrás de ella algún tiempo, ya que no la tienen en Otaku Center) y una camiseta de Domo-kun (un regalo *o*), además de una setita de Super Mario monísima para el móvil (para sustituir al recientemente desaparecido colgantito de Gin T__T). También me compré un póster del gato de Shrek; ahora habrá que buscarle sitio.

 Bueno, creo que ya está todo. Me ha encantado la experiencia y pienso repetir. (Al igual que se han reforzado mis ganas de aprender catalán.) Me habría gustado haber paseado un poco por Barcelona (aunque ya había estado hace bastante tiempo), a ver si para la próxima podemos hacer algo de turismo.

 Ahora, dentro de un mes, ¡el Expocómic! (¡Tengo que ir preparando el cosplay!) Nada más, espero que os haya gustado el mini-reportaje.